La concejala afirma que “la intervención ha sido superficial y únicamente se ha retirado vegetación baja y/o rastrera, no sujeta a protección por lo que la zona a proteger y la masa forestal están intactos”
La concejala de Urbanismo, Nayra Navarro, informa que el acondicionamiento como zona de aparcamiento de un terreno en La Playa cumple con lo recogido en los planes territoriales y urbanísticos vigentes.
En contra de la información ofrecida por Nueva Canarias La Aldea, en la que acusa al Ayuntamiento de “destruir una zona de sensibilidad etnográfica y arqueológica en el límite del BIC de El Charco y el entorno del Centro de Interpretación de Caserones”, el Consistorio señala que “las actuaciones realizadas no ponen en riesgo yacimientos, o lo que pueda quedar de ellos, ya que con el acondicionamiento de estos terrenos se cumple estrictamente con lo establecido en los planes territoriales y urbanísticos”.
La edil recuerda que la parcela que se ha acondicionado se ha utilizado “durante muchos años como aparcamiento, cantera o zona de acampada militar” y “se dejó de usar como zona de estacionamiento en el pasado Mandato, por motivos muy distintos a la protección del mismo”.
Los años en que se destinó como aparcamiento público “siendo concejal de Urbanismo el ahora portavoz y presidente de Nueva Canarias La Aldea, José Miguel Rodríguez, nunca dijo nada de protegerlo por los motivos por lo que ahora acusa a este Gobierno municipal”, continúa.
El espacio en el que se ha actuado ha sido perimetrado por los técnicos municipales, quienes han señalado exactamente la zona que era intocable, cumpliéndose estas recomendaciones por parte de los operarios municipales que han llevado a cabo el acondicionamiento.
Así, se ha limpiado la capa superficial del terreno retirando vegetación baja y/o rastrera no sujeta a ningún tipo de protección. Además “y por primera vez”, explica la edil, “se va a señalizar exactamente donde empieza la zona que sí está sujeta a protección, para evitar intromisiones de los usuarios del aparcamiento”.
Calificación del terreno
Los instrumentos de planeamiento son los que se encargan de proteger los valores naturales, etnográficos, arqueológicos y agrarios, entre otros muchos, a través de la zonificación y clasificación del territorio. Así, el terreno que se ha acondicionado aparece en el Plan Insular de Ordenación de Gran Canaria como una “zona de bajo valor natural y escaso valor productivo”.
Por su parte el Plan General de Ordenación en vigor lo clasifica como Suelo Rústico de Protección paisajística y en el Plan General de Ordenación Supletorio, aprobado inicialmente durante el mandato anterior en el que Nueva Canarias ostentaba la Alcaldía, lo clasifica como Suelo Urbanizable.
Esta clasificación incluye dos yacimientos en el interior del espacio libre a ejecutar, para una posible ampliación del Parque Rubén Díaz.