Virginia Rosa León Armas, pregonera de las Fiestas Patronales de La Aldea de San Nicolás 2018, ha ofrecido este sábado un emotivo discurso, en su deseo de ofrecer “unas palabras sinceras, sentidas y brotadas del corazón”, con las que corresponder al honor que supone para ella haber pregonado las Fiestas de “mi pueblo”, del que dijo que siempre ha recibido afecto y cariño.
El acto, celebrado esta noche ante el Pórtico de la Parroquia de San Nicolás de Tolentino y frente a la recién remodelada Alameda, fue presentado por el periodista Santiago García Ramos. Se contó con la presencia del alcalde, Tomás Pérez, y la concejal de Festejos, Yasmina Llarena.
El alcalde destacó en su discurso la alegría por las fechas tan significativas para el municipio que se aproximan, e hizo un llamamiento a vecinos y visitantes para que vivan intensamente las Fiestas, respetando “el legado cultural festivo heredado de generaciones anteriores”, que hace sentir tanto orgullo al municipio. Además, tras la intervención de la pregonera, la felicitó porque “has ofrecido un pregón con el alma, para las almas”.
Un orgullo de ‘aldeana’ al que también hizo referencia la pregonera, quien señaló que “mi satisfacción por estar aquí́, con todos ustedes, es doble. Primero, porque para mii supone el reencuentro con mi tierra natal. Esta pregonera se encuentra cargada de afecto y cariño a este pueblo, que es lo que recibe y he recibido siempre de mi gente. El afecto, el cariño, ese motor tan potente de las emociones y los sentimientos, que no se aprenden en los manuales ni en lo máster.
Se aprende en la convivencia, en el calor de la familia y las amistades, y, principalmente, en todos ustedes, personas que hacen y hacemos parte de nuestro recorrido vital a este pueblo llamado Aldea de San Nicolás .Y segundo, por ser siquiera por un momento, la voz de todo un pueblo que esta noche resuena en el silencio”.
Prosiguió destacando que La Aldea de San Nicolás “tiene encanto, magia, embrujo, solera, duende, historia, fantasía, sosiego, espíritu, emoción, ensueño, leyenda, inspiración y, sobre todo, la capacidad de mantener la armonía entre su pasado y su presente”. Por ello, Virginia afirmó que “eso le garantiza un futuro brillante, muy esperanzador, si la cuidamos”.
Las Fiestas Patronales son un momento clave en el calendario aldeano. “Por unos días el pueblo se ilumina”, señaló Virginia. “Se palpa la alegría en nuestra gente y en los que nos visitan, en cierto modo se rehace. Y los que un día, más o menos lejano emigramos, podemos encontrar de nuevo nuestras raíces, las caras amigas, los olores familiares”, continuó.
Los recuerdos de las Fiestas de su niñez y juventud fueron el hilo conductor para hablar de su infancia e ir desgranando vivencias en su época escolar y juvenil. “Fue una infancia muy feliz que siempre recuerdo con mis hijos, me enorgullezco de ser aldeana nacida, criada y ensolerada”, aseguró.
Quiso hacer un amplio repaso de colectivos que actualmente hacen de La Aldea de San Nicolás “un pueblo dinámico y vivo”, como el Proyecto Cultural de Desarrollo Comunitario, el Coro Parroquial, los numerosos deportistas de diferentes disciplinas o las bandas de música.
Virginia León recordó el momento en el que tuvo que marcharse del municipio. “Como muchas otras personas, necesaria e inconscientemente, fui realizando mi adaptación a los cambios, pero mis pensamientos en los ratos libres siempre me recordaban mi sentido de pertenencia a este lugar y a su historia, así como también mi identidad con su gente”, señaló.
«Hacer Aldea fuera de La Aldea»
La pregonera, enfermera de profesión, destacó en su intervención que “con las experiencias vividas, llegué a aprender y entender que también fuera de La Aldea se hace Aldea. Por ello, en este momento, en esta plaza, quiero reivindicar la dimensión de muchos aldeanos de a pie, como yo, que estamos fuera del pueblo y que, a través de nuestra profesiones y actuaciones comprometidas con el beneficio a nuestros paisanos, a nuestra gente, hacemos Aldea fuera de La Aldea”.
Tuvo un recuerdo para dos personas fallecidas este año, Eligio y la concejal Lili, de la que aseguró “que esta noche está aquí con nosotros”, para finalizar agradeciendo de nuevo al Ayuntamiento el ser elegida para pregonar las Fiestas, y a su familia y amigos, por su apoyo.
El acto finalizó con la imposición por parte del alcalde de la insignia de Oro y Brillantes del municipio a la pregonera, la entrega de un ramo de flores por parte de la concejal, Yasmina Llarena, y la firma en el libro de honor de los pregoneros de Virginia Rosa León, quien escribió que “esta noche he experimentado que he sido muy afortunada de haber nacido aquí. No olvidaré jamás este día”.