La maquinaria y operarios ya están en la zona. El Cabildo ha establecido horarios intensivos para tratar de recortar al máximo los plazos previstos en la reparación de la vía
El Servicio de Carreteras del Cabildo de Gran Canaria ha confirmado al alcalde, Tomás Pérez, que la maquinaria y los operarios ya se encuentran en la zona de la GC-200 donde se derrumbó el pasado miércoles un muro de contención que ha obligado al cierre de la vía y que han comenzado los trabajos de reparación del mismo.
Los responsables técnicos de la obra han asegurado a Tomás Pérez que trabajarán en horario intensivo, mientras haya luz, para recortar lo máximo posible los plazos de ejecución, previstos en un principio de mes y medio a dos meses.
Tras los estudios e informes pertinentes han decidido que, aunque el derrumbe del muro afectó directamente a unos 25 metros de vía, los trabajos estarán orientados a reparar un total de 40 metros.
Desde el Ayuntamiento aseguran que el alcalde mantiene el contacto continuo con el consejero de Carreteras, Ángel Víctor Torres, y con los responsables técnicos de la obra. Pérez ha transmitido la necesidad de que la se ejecute «con la mayor celeridad», ya que este cierre provoca muchos problemas de conectividad a los vecinos.